Cimientos
“Construyendo las bases para la terminalidad educativa”
En 2006 la escuela secundaria se convirtió en obligatoria pero en Argentina 1 de cada 2 chicos que accede no la termina. Desde hace 18 años Cimientos acompaña a miles de jóvenes para que permanezcan y terminen el Nivel Medio.
Desde 2006 la escuela secundaria es obligatoria y viene a completar los 13 años de educación que toda persona debe recibir tras la sanción de la Ley de Educación Nacional N° 26.206.
Destinada a todos aquellos que cumplieron con el nivel de Educación Primaria, busca habilitarlos para que ejerzan plenamente su ciudadanía, ya sea continuando sus estudios o ingresando al mundo laboral. Cabe recordar, y tal como lo aseguran los especialistas, la escuela secundaria fue creada para un grupo selectivo de la sociedad y atada a la entrada a la universidad, es por eso que en los años ‘50 solo el 10% de los jóvenes asistía al secundario mientras que hoy ingresa cerca del 95%.
Uno de los fines y objetivos de la política educativa nacional de la norma antes mencionada figura inicialmente “asegurar una educación de calidad con igualdad de oportunidades y posibilidades, sin desequilibrios regionales ni inequidades sociales”.
Ahora bien, en Argentina, se afirma que el 50% de los chicos que ingresa a la escuela secundaria no la termina ya sea por las diferentes realidades económicas, alto índice de repitencia, sobreedad, desmotivación, necesidades básicas insatisfechas o embarazo adolescente. Palabras más, palabras menos: todo desencadena en el abandono escolar.
Se trata del principal problema que afecta mayormente a la población de las zonas más vulnerables. Un fenómeno multicausal determinado por: la biografía individual de cada chico, su contexto socio familiar y las características de las escuelas a las que concurre.
Nuestro país cuenta desde 1997, con un grupo de profesionales que preocupados por la educación fundó Cimientos: una organización sin fines de lucro que trabaja para que los chicos de bajos recursos terminen el secundario.
Hace 18 años que Cimientos desarrolla programas educativos en todo el país y acompaña a miles de chicos para que permanezcan y terminen la escuela secundaria. Es la misma organización la que trabaja sobre la base de que “hoy en la Argentina 1 de cada 2 chicos que empiezan el secundario no lo terminan”.
Desde su nacimiento, la entidad benefició a más de 84.000 jóvenes y 13.800 educadores con la implementación de sus programas en Argentina y replicados en Uruguay y Colombia.
Asimismo, ha sido reconocida y premiada por prestigiosas organizaciones nacionales e internacionales con el Premio Estímulo a la Educación del Harvard Club de Argentina (2012), Business Guide de Naciones Unidas (2007) y Fundación Schwab (2005), entre otros.
Cimientos busca atacar la base del abandono escolar y los altos niveles de repitencia aunque no deja de considerar que los jóvenes en condición de vulnerabilidad socioeconómica son los más afectados.
“La profunda desigualdad en la distribución de los recursos económicos, sociales y culturales que caracteriza a América Latina se refleja en las trayectorias escolares de sus niños y jóvenes y las dificultades para sostener la escolarización se concentran fuertemente en los sectores sociales más desfavorecidos”.
“El rezago escolar se acumula y las desigualdades socioeconómicas, por área geográfica o según origen étnico, se acrecientan. El clima educativo del hogar es un factor determinante en el rezago escolar entre los 12 y los 14 años: un niño perteneciente a un hogar con bajo clima educativo tiene 10 veces mayor probabilidad derezagarse que uno proveniente de un hogar con buen clima educativo. También se observan diferencias importantes según el área de residencia”, dice el informe final del proyecto Metas Educativas 2021: La educación que queremos para la generación de los bicentenarios.
En mayo de 2008, los estados iberoamericanos consensuaron impulsar la iniciativa con el firme objetivo de mejorar la calidad y la equidad en la educación para hacer frente a la pobreza y a la desigualdad y así favorecer la inclusión social.
Con la implementación de tres programas, Cimientos basa su trabajo desde hace 18 años en acompañamiento educativo, apoyo económico y articulación e intercambio de experiencias entre los actores involucrados. La Red de Egresados favorece la inserción educativa y/o laboral de aquellos alumnos que hayan terminado su trayectoria escolar dentro del programa en la entidad. La Ronda de Directores genera espacios de capacitación continua para autoridades educativas y equipos directivos de escuelas secundarias. Finalmente, Conecta2 brinda acompañamiento educativo, utilizando las nuevas tecnologías y estableciendo un contacto virtual.
Celebramos el trabajo de Cimientos construyendo desde la educación y auguramos que con el paso del tiempo ya no tengamos que hablar de “1 de cada 2 chicos que empiezan el secundario no lo terminan”. O lo que es peor aún, que sigamos buscando explicación a que el 50% de la futura población económicamente activa vio truncados sus estudios.
Si querés conocer más ingresá a www.cimientos.org.